Ser Bilingüe
LA IMPORTANCIA DE ELEGIR UNA EDUCACIÓN BILINGÜE
Existen de las más variadas y pintorescas maneras de definir a la persona bilingüe. Nosotros vamos a destacar la definición que hace un pionero en bilingüismo, Francois Grosjean. Él nos dice que la persona bilingüe es la que utiliza más de una lengua por la necesidad de su vida cotidiana y que desarrolla competencias en sus lenguas en la medida en que sus necesidades lo requieran. Ahora bien, ¿cuándo conviene comenzar con la enseñanza de la segunda lengua y cuáles son esos beneficios de los que todos hablan?
Hay quienes creen que los niños que están recién adquiriendo su primera lengua, no deben ser expuestos a una segunda hasta que la materna esté fortalecida. Debido a esto, no se hace hincapié en comenzar la escolaridad bilingüe desde chicos. Sin embargo, las investigaciones dicen otra cosa.
Analicemos un poco la historia. Esta creencia aflora en el siglo XX con las herramientas que evaluaban la inteligencia infantil. Estos estudios indicaban que los bilingües sufrían una sobrecarga mental, que se confundían y que se retrasaba el desarrollo de la primera lengua. Lamentablemente, dicho concepto se popularizó y dejó sus huellas en la educación de varios países por mucho tiempo.
Afortunadamente, hoy en día contamos con un bagaje extenso de estudios que refutan la idea de que es perjudicial introducir una segunda lengua desde pequeños. Es más, los especialistas ya hablan de los beneficios del bilingüe temprano y bilingüe tardío. El bilingüe temprano es aquel que es expuesto a la segunda lengua durante los primeros años hasta alrededor de los 5 o 7 años. El niño que incorpora la segunda lengua durante esa edad, lo hace mediante los mismos mecanismos que rigen su primera lengua. Por ejemplo, la gramática se procesa automáticamente, sin reflexionar sobre la misma. Por otro lado, para el bilingüe que adquiere la segunda lengua después de los 7 años, el nivel de eficacia en el idioma dependerá de la cantidad de horas, la motivación y la aptitud para la incorporación consciente de información. Bialystok et al. (2010) realizaron un estudio con 1738 niños de entre 3 y 10 años. El grupo de monolingües demostró un repertorio léxico más amplio que los bilingües en una sola de sus lenguas, pero los bilingües son capaces de comprender y producir equivalentes de traducción desde muy chicos. Es por ello que se concluyó que, en comparación, el bilingüe domina mayor cantidad de palabras si se considera el vocabulario de ambos idiomas.
A continuación, para dar respuesta sobre los beneficios de la persona bilingüe, analizaremos diferentes estudios que se han realizado sobre el tema. Peal y Lambert (1962) se destacaron por ser pioneros en rebatir el concepto de que el bilingüe tiene los mismos beneficios cognitivos que el monolingüe. Más recientemente, el estudio de Carlson y Meltzoff (2008) obtuvo resultados favorables para los bilingües. Los investigadores aplicaron nueve tareas de control ejecutivo en una muestra de 50 niños de alrededor de 6 años. Los alumnos bilingües evidenciaron ventajas cuando la tarea exigía focalizar la atención para seleccionar información específica ignorando distractores. El estudio concluyó que el grupo bilingüe poseyó mayor competencia en ciertos aspectos de las funciones ejecutivas. Por otro lado, Costa et al. (2009) demostraron la superioridad del bilingüe para resolver conflictos de información y destacaron su eficiencia para el procesamiento de estímulos conflictivos. Los monolingües tuvieron mayor dificultad en cambiar la regla y persistían en el criterio dado mientras que los bilingües demostraron ser más hábiles para cambiar la regla adaptativamente y resolver con mayor rapidez y eficacia la tarea.
Es conveniente agregar que ciertas investigaciones van más allá de los beneficios en niños únicamente. Craik et al. (2010) sostienen que la experiencia bilingüe aumenta la competencia en tareas no lingüísticas a lo largo de la vida e incrementa la reserva cognitiva en adultos mayores. Por ejemplo, se observó que los adultos bilingües con Alzheimer son diagnosticados 4 años más tarde que los monolingües. No se puede decir que el hablar dos lenguas evitará desarrollar una enfermedad neurodegenerativa. No obstante, sí podemos afirmar que retrasará la aparición de los síntomas alrededor de 5 años debido a que la persona posee una mayor reserva cognitiva.
A la luz de la evidencia actual, el bilingüe se beneficia sin comprometer el desarrollo del lenguaje de su primera lengua ya que lo enriquece con la adquisición de la segunda. Es de suma importancia comenzar con la exposición a la segunda lengua lo antes posible, ya que el bilingüismo representa una especie de gimnasia cognitiva que incrementa el rendimiento intelectual y académico de la persona. En consonancia con estos datos, los colegios de Apdes promueven, en sus alumnos, el comienzo de un camino hacia el bilingüismo desde una temprana edad. De esta manera, se busca garantizar el desarrollo de la segunda lengua, logrando un bilingüismo temprano y obteniendo los beneficios para los niños.
Colegio Portezuelo, Los Olivos y Jardín Platero
Referencias:
- Bialystok E, Craik FIM, Luk G. (2008) Cognitive control and lexical access in younger and older bilinguals. Journal of Experimental Psychology: Learning, Memory, and Cognition.
- Bialystok E, Luk G, Kwan E. (2005)Bilingualism, biliteracy, and learning to read: Interactions among languages and writing systems. Scientific Studies of Reading.
- Peal, E., & Lambert, W. E. (1962). The relation of bilingualism to intelligence. Psychological Monographs: General and Applied
- Stephanie M. Carlson Andrew N. Meltzoff (2008) Bilingual experience and executive functioning in young children
- Costa et al. (2009) On the bilingual advantage in conflict processing: Now you see it, now you don’t
- Craik et al. (2010) Delaying the onset of Alzheimer disease Bilingualism as a form of cognitive reserve.
- Adolfo M.García, Sonia Suárez Cepeda (2016). Mente Bilingüe, abordajes psicolingüísticos y cognitivistas.