ÚNICOS E IRREPETIBLES
Nuestro objetivo como Colegios no es solo formar excelentes profesionales. Más de 15 años de educación se orientan al desarrollo de personas íntegras y fundamentalmente: felices. Por eso, a la formación académica, se une el aprendizaje de las habilidades y competencias que están en la base de la felicidad y la realización personal.
Por encima de todo, queremos que cada niña y niño sea… feliz. En cada Colegio, desde hace más de 50 años, tenemos una gran ayuda para conseguirlo: la tutoría.
La tutoría es resultado del cariño, la profesionalidad y la dedicación de padres y profesores. Así, cada alumno recibe un cuidado único y personalizado.
¿Qué es la tutoría y en qué consiste?
Las profesoras y profesores, dedican parte de su jornada a conversar, en un marco de libertad, con cada uno de los alumnos y con los padres. Esta comunicación fluida facilita el crecimiento en todos los aspectos que conforman la personalidad humana.
Aseguramos así que el proyecto educativo del Colegio llegue individualmente a cada alumno y a su familia.
Dentro de nuestro equipo educador, la tarea de tutoría es también una labor de equipo, resultado del trabajo de los tutores con el apoyo de las profesoras que imparten clase al alumno. Los docentes, después de cada evaluación, se ocupan de trasladar a los tutores los aspectos académicos, humanos y competenciales que enriquecen con hechos objetivos la atención individualizada.
Esto permite que la entrevista con los padres abarque no solo los aspectos académicos, que en muchas ocasiones son buenos. Es el momento para resaltar aspectos o puntos de crecimiento en el alumno, destacar potencialidades que quizá les han pasado desapercibidas o bien, para adelantarse a situaciones de especial ayuda
Los padres y profesoras trabajamos juntos promoviendo el crecimiento personal de los alumnos. Un elemento esencial de la tutoría es la libertad. Los tutores orientan y aconsejan, nunca imponen, cuentan siempre y en primer lugar con el parecer de los padres -principales educadores- y con los alumnos. El auténtico reto de la tutoría es lograr que la sugerencia inspire, interpele y se acoja libremente. Ayudarles a descubrir por ellos mismos lo que es bueno, bello y pueda hacerles realmente felices.
Por tanto, el clima que envuelve la tarea de la tutoría siempre es el cariño, la confianza, el respeto, el deseo de bien.
Acá presentamos un resumen de los top 10 de la tutoría:
El papel del Departamento de Orientación
La formación integral que ofrecemos en nuestros Colegios cuenta con la tutoría como factor clave. . El sentido trascendente y la inspiración cristiana que subyace en nuestro ideario encuentra en las conversaciones personales con padres y alumnos el apoyo sólido donde asimilarlo libremente e incorporarlo a la vida.
Un papel importante de los tutores es ayudar y salir al paso en las situaciones de alumnos con alguna dificultad de aprendizaje. En ese caso entra en juego el departamento de orientación, el cual, junto al resto de profesores y profesoras que dan clase a esos alumnos, se ocupa de supervisar, coordinar y ejecutar aquellas medidas que el alumno pueda necesitar.
A lo largo del año puede ser oportuno que en alguna de las entrevistas entre los tutores y los padres acuda la orientadora para dar información o contrastar con los padres sobre las medidas tomadas.
Nuestros docentes, además de formar con excelencia académica y con carácter integral e individual, procuran proporcionar a nuestros alumnos herramientas que les permitan afrontar y fortalecerse ante las dificultades, adquiriendo por sí solos los recursos para superar los obstáculos y convertir las limitaciones en factores positivos.
La comunicación en las tutorías entre tutor y alumno
Los alumnos encuentran en los tutores, alguien que les escucha, que ofrece consejo y apoyo en los momentos difíciles. Alguien a la que no solo le importan los resultados académicos sino la totalidad de su vida presente y futura. Con el tiempo, la confianza y la discreción, los alumnos son capaces de compartir su proyecto personal de futuro tanto en el aspecto académico como personal. Esas conversaciones, han sido testigos de decisiones trascendentales en la vida de nuestros alumnos.
Los tutores son los profesores que velan por el crecimiento personal de todos los hijos de la familia. Se puede acudir a ellos en cualquier momento. Siempre está. Actúa como canal de comunicación directo con los padres. En cualquier situación o circunstancia su disponibilidad es inmediata. Vela y cuida individualmente de cada uno de los alumnos encomendados.
Entrevista con padres. Tutoría Familiar
A lo largo del curso se dan como mínimo tres momentos en los cuales los tutores mantienen una conversación con los padres sobre cada uno de sus hijos. Estas ocasiones materializan la fórmula de éxito en la educación, que para nosotros es la estrecha relación entre el tutor, el alumno y los padres.
Antes de la entrevista con los padres los tutores preparan la información académica, de comportamiento y de amistades. Ese momento es clave para elaborar una información completa de modo que, a la hora de conversar con la familia, se aporten datos objetivos que puedan ayudar al crecimiento personal del alumno.
Los padres también pueden preparar la entrevista con todo aquello que ven sobre sus hijos en casa. La mirada de unos padres es vital para acertar en las conclusiones u objetivos que se adopten para el bien de su hijo.
Con este intercambio de informaciones sobre rendimiento escolar, actitudes y habilidades, comportamiento, capacidad para asimilar la formación que va recibiendo, etc., se logra esa sintonía tan necesaria entre la escuela y la familia. Así se va consolidando la educación personalizada, adaptándose a las diversas situaciones y etapas que atraviesa el alumno o la familia.
Especialmente cuando los alumnos crecen y son adolescentes, los tutores mantienen la discreción sobre determinados temas confiados por los alumnos. Podrá dar ideas a los padres de cómo mejorar el clima de confianza con sus hijos o qué aspectos convendría seguir más de cerca con cariño y paciencia. En algunos momentos hay que dar seguridad para educar, presentando la tarea educativa como un proyecto asequible y encaminado al bien de los hijos y de la familia.
El equipo de profesoras y tutores procuramos que el clima de estas conversaciones sea de confianza y esperanza. Nuestro reto es que ningún problema ni situación quede sin resolver y que los alumnos y familias encuentren un horizonte positivo dónde crecer.