Alumni

TRANSFORMADORES DEL MUNDO

NUESTROS ALUMNI

Esperamos que nuestros egresados, al finalizar la escolaridad, sean capaces de:

-Ser autónomos, con una unidad de vida sólida y virtuosa, que integre todas las dimensiones de la persona. Libres para amar.

-Aplicar, en el marco de un trabajo colaborativo, las competencias comunicativa, emocional y social y el pensamiento crítico, que le faciliten desenvolverse en el mundo actual. Ser creativos y capaces de innovar.

-Dar razón de su esperanza, uniendo armónicamente la razón y fe en sus vidas, buscando ser coherentes en el testimonio personal y llevar los valores cristianos a todas las actividades humanas donde se desenvuelven.

-Ser líderes, con compromiso social.

-Saber percibir, descubrir y crear belleza, incorporándose a su propia existencia, con responsabilidad para asumir una vida sana y respetar el medio ambiente.

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Valores para siempre

“El deporte fue una gran herramienta que nos ayudó a crecer a lo largo de estos años. (…) No solo nos trajo copas sino que nos inculcó valores que nos van a servir para siempre; valores que nos llevan a ser personas íntegras y únicas. Se formó un gran grupo en el cual cada uno puede rescatar amistades que van a durar para toda la vida”.

Extractos del discurso de Francisco Albanese Lo Valvo, egresado de la Promoción XXXVII del Colegio Los Molinos.

Ser familia

Lo recuerdo con mucho cariño, para mí lo más importante era esa “búsqueda de familia”, de unión. Uno se sentía en familia, siempre había alguien que te estaba prestando atención, que para otros podría haber pasado desapercibido, pero en general las docentes notaban si estabas preocupada, si no eras la misma de siempre. Uno no era su apellido, sino un nombre.

De mi formación valoro fundamentalmente que las metas que teníamos en el colegio, trabajando distintos valores cada mes, me ayudaron a formar el carácter y a generar el hábito de estudio.

Extracto del testimonio de Cristina Arregui Egresada Colegio Crisol, La Plata

Amistades de oro

“Verán con el tiempo que se están llevando de su paso por el colegio más cosas de las que hoy creen estar llevándose (…) Los amigos que uno hace en este colegio son distintos. Son de oro, son vos mismo en otro envase. Andar por la vida con esta clase de amigos, la hace mucho más fácil (…) La posibilidad de ser padres exalumnos. La emoción de volver a tu colegio con tu hijo para empezar primer grado es tremenda. Espero que Dios les tenga reservado un regalo como este”.

Extractos del discurso de Máximo Colombo, exalumno (1a Promoción) y padre de Francisco